Terremoto en Marruecos: la cifra de muertos asciende a 2.500
Fue de 6,8° y tuvo su epicentro en la localidad de Ighil, situada 63 kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech. Se contabilizan 2.476 heridos, anunció el Ministerio del Interior del país.
El balance provisorio del terremoto que golpeó el viernes una región al sudoeste de la ciudad turística de Marrakesh en Marruecos subió a 2.497 muertos, mientras que hay 2.476 heridos, anunció este lunes el Ministerio del Interior del país del norte africano.
El informe anterior sobre víctimas fatales reportaba el domingo la cantidad de 2.122 muertos, pero en un comunicado difundido hoy por las autoridades marroquíes se indicó que el número ascendió a 2.497 y que hay además los servicios médicos atienden a 2.476 heridos, consignó la agencia de noticias AFP.
El sismo ocurrió en la noche del viernes y fue de magnitud 6,8 según los servicios geológicos estadounidenses y 7 según el centro marroquí para la investigación científica y técnica.
Fue el más potente desde que hay registros modernos en este reino del norte de África.
La provincia de Al Hauz, epicentro del sismo, fue la más golpeada, seguida de Tarudant. En estas dos zonas situadas al sudoeste de la turística ciudad de Marrakech, la sacudida destruyó aldeas enteras.
En tanto, un nuevo terremoto de magnitud 3,9 en la escala Richter sacudió este domingo esa región, informó la agencia Europa Press.
El Servicio Geológico de Estados Unidos señaló que el nuevo sismo se produjo a las 7.59 hora local en una zona montañosa situada en el sur de la región de Marrakech-Safí.
El epicentro fue ubicado a 10 kilómetros de profundidad, a medio camino entre las ciudades de Marrakech y Agadir.
En el pueblo de Amizmiz, cerca del epicentro, los equipos de rescate recogían escombros con sus propias manos. La mampostería caída llenaba las estrechas calles. En el exterior de un hospital, una decena de cadáveres yacían cubiertos con mantas y acompañados por sus familiares.
Los equipos de rescate se encontraban sobre los suelos destrozados de un edificio de Amizmiz, con trozos de alfombra y muebles sobresaliendo de los escombros.
Había una larga cola ante la única tienda abierta mientras la gente buscaba provisiones. Para subrayar las dificultades a las que se enfrentan los equipos de rescate, las rocas caídas bloqueaban la carretera que une Amizmiz con un pueblo cercano.
Daños en la ciudad vieja
Según la Organización Mundial de la Salud, más de 300.000 personas se vieron afectadas en Marrakech y sus alrededores.
Marruecos declaró tres días de luto nacional, durante los cuales la bandera nacional ondeará a media asta en todo el país, informó el sábado la corte real.
Las fuerzas armadas marroquíes desplegaron equipos de rescate para proporcionar a las zonas afectadas agua potable, alimentos, tiendas de campaña y mantas, añadió.
Bajo los escombros
Naciones Unidas está dispuesta a ayudar al Gobierno marroquí en «sus esfuerzos para asistir a la población afectada», dijo el portavoz de la ONU Stephane Dujarric en un comunicado.
Gobiernos de todo el mundo expresaron su solidaridad y ofrecieron ayuda.
En diálogo con medios nacionales, Imane Dryef, diplomática marroquí, ex representante de la embajada marroquí en Argentina dijo que hasta el momento no se han registrado víctimas argentinas.
Además indicó que las fuerzas armadas desplegaron recursos humanos y logísticos con equipos de búsqueda de salvamento y la gente se apostó a donar sangre.
También señaló que muchos pasaron la noche afuera por miedo a las réplicas y destacó que es el terremoto «más violento que se haya conocido en Marruecos».
Mientras los equipos de rescate marroquíes continúan los esfuerzos para encontrar supervivientes y asistir a las miles de personas afectadas, llegan las ayudas humanitarias al país.
En ese marco, el director argentino de la ONG española DCPM, Adrián de la Cruz, contó las operaciones que están llevando a cabo en ese país.
Comentó que él, junto a otros miembros de la entidad, viven en Abid, ciudad marroquí ubicada a unos 200 kilómetros del epicentro del terremoto, en la zona de Marrakech.
«Estamos procurando llegar a la gente porque se cortaron los suministros de luz y agua; la gente local se ha movilizado muchísimo tratando de llevar asistencia», señaló, y precisó que están intentando coordinar la ayuda que pueden canalizar para la gente más necesitada.
Y concluyó: «La ayuda está llegando de parte de las autoridades, organizaciones y de la misma sociedad marroquí y estamos tratando de sumar de la manera que podemos».
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