La producción fue creada por Joe Berlinger y consta de tres episodios de una hora; en apenas cuatro días, se posicionó en el top 10 de la plataforma de streaming.

No hay dudas de que la historia del asesino serial alcanzó un gran éxito Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer es la serie más vista en la Argentina y en el ranking global de Netflix. A su vez, se posicionó entre los diez primeros puestos de la plataforma de streaming en 92 países. Ahora, además de la serie inspirada en los asesinatos y el proceso judicial del «caníbal de Milwaukee», se estrenó una docuserie, Conversaciones con asesinos: Las cintas de Jeffrey Dahmer, en la que se revelarán imágenes y audios reales. «Era mi pequeño mundo privado, tenía el control total», se escuchó decir al criminal.

Dahmer asesinó a 17 varones, adultos y niños, entre 1978 y 1991, en los Estados Unidos. Los seducía, los mataba, los descuartizaba y almacenaba algunas partes de los cuerpos en su casa. Otras, las ingería. Sus crímenes conmocionaron al mundo y fue condenado a 15 cadenas perpetuas consecutivas en la prisión de Columbia (Wisconsin), donde fue asesinado a golpes en 1994 por un compañero de celda.

Desde su estreno el 21 de septiembre, la producción de Ryan Murphy fue aclamada por los espectadores, pero también criticada por parte de los familiares de las víctimas y otras comunidades, como la LGBT (por incluir anteriormente este tag).

Ahora, el director y productor estadounidense Joe Berlinger se sumó a este auge. Conversaciones con asesinos: Las cintas de Jeffrey Dahmer está disponible en la plataforma de streaming desde el 7 pasado e incluye los audios reales de cada crimen que cometió el asesino serial. En tan solo cuatro días, se posicionó dentro del ranking en nuestro país y pareciera que seguiría los pasos de la exitosa serie.El estremecedor relato de la madre de Jeffrey Dahmer

Joyce Anette Dahmer siempre estuvo al lado de su hijo. Luego de su histórica condena, la mujer lo llamó cada semana. Además, aseguró que Jeffrey «fue víctima de una compulsión y una obsesión». Y agregó: «No pretendía hacer daño a nadie. Es muy inteligente y merece ayuda. No digo que deba estar fuera de prisión, pero no es un monstruo, es un ser humano».

Joyce falleció el 7 de noviembre de 2000, debido a un cáncer de mama. En 1994, meses antes de que Dahmer fuera asesinado en prisión por un compañero de celda, la mujer trató de quitarse la vida y dejó una nota: «Todavía amo a mi hijo. Nunca dejé de amarlo», decía el escrito.

Fuente: Nueva Rioja