«Citrorat», el peculiar auto a punto de llegar a Madryn
Pasaron por Santa Rosa (La Pampa) y se encaminan a Las Grutas, para llegar a su objetivo.
El martes pasado, NUEVA RIOJA publicó la travesía y la gran aventura, donde dos amigos se embarcaron arriba de un Citroën 3cv, para llegar a Puerto Madryn y dar la vuelta hasta llegar nuevamente a su querida Rioja.
Marcos Amaya y su copiloto y amigo Pablo Castillo, con quien comparte experiencias desde hace más de 15 años, emprendieron un viaje desde La Rioja hasta Puerto Madryn en un Citroën 3cv – Rat Rod.
Para tener en cuenta esta odisea, hay que resaltar que viajan a un promedio de 65 kilómetros por hora.
«Quisimos parar la rutina y vivir una aventura entre amigos que marque nuestras vidas», así describieron esta situación, estos dos riojanos, que durante este tramo, ratificaron que esta gran nación tiene almas bondadosas, como los mecánicos a los cuales acudieron ante algún desperfecto.
» Las cosas planificadas pueden salir mal, que lo importante es fluir y que en argentina, hay mucha gente solidaria y de buena madera», indicaron mediante sus redes sociales. De hecho, se puede seguir cada uno de los trayectos, por intermedio de: «Citrorat», tanto en Facebook como Instagram. Al cierre de esta edición, viajaban desde Santa Rosa (La Pampa) hasta Las Grutas, para luego llegar a Puerto Madryn. «Veremos que onda», sintentizaron en esta bitácora de viaje.
La buena gente del País
En uno de los tramos comprendidos de viaje les pasó un desperfecto mecánico, que pudieron solucionar. «30 KM antes de llegar a Villa Mercedes, empezamos a tener complicaciones con la presión de aceite y eso hizo que vengamos más despacio de lo normal y justo llegando al peaje, el CITRORAT se enojò y no quiso seguir más. Gracias a la solidaridad de todos los que siguen esta aventura, logramos conseguir un mecánico que nos lleve a tiro hasta su taller, donde nos dimos que la base que ajusta el platino, se desarmo por completo, mañana intentaran reparar eso, cambiaremos aceite y partiremos para Santa Rosa La Pampa si todo sale bien», añadieron.
«Si bien salimos de nuestra amada provincia cargados de buena energía, amigos deseándonos el bien, no imaginábamos la cantidad de amigos que conoceríamos en tan pocos kilómetros, ¿será el Citrorat? ¿será el destino? ¿será el mundo fierrero? o ¿será que en Argentina hay mas gente buena que mala?», se preguntaron en otro posteo que realizaron por sus redes sociales. Allí especificaron a aquellas personas que les tocaron sus corazon. «En Chamical, nos cruzamos con nuestro amigo Eduardo Paschetta quien nos regalo cositas para el citro. En Merlo los hnos Manzano, quienes se enteraron que estábamos allí y prendieron fuego para un tremendo asado en familia. En Villa Mercedes a Lucia Lacerda, desde la secretaria de Turismo quien nos hospedaron un un tremendo camping llamado Las Toscas. En Nueva Esperanza, a la magnifica Yoconda, presidenta del club Unidos por el Citroën, quien nos acerco frutuas, charlamos un poquito bajo la sombra. Y en Santa Rosa (La Pampa), una hermandad de fierreros llamados Hot Rod La Pampa, donde comimos un cordero a la llama y nos juntamos a tomar unos mates y charlar de fierros, un ejemplo de club tienen estos pibes», acotaron. «Detalle importante: Nuestras familias apoyando el sueño desde casa, hacen que esto sea mas hermoso aún», explicaron.
Como un dato curioso que tienen estos intrépidos amigos es la graciosa y mística compañía de «Movarak». Es un duende fierrero, sabio y tiene el rol de «inspirarnos en las decisiones a tomar, es quien nos cuida energéticamente», añadieron. Está en compañía de su nieto, llamado «Limao».
El origen
Todo comenzó con un hecho bisagra, el preinfarto de uno de uno de estos intrépidos amigos, quienes decidieron hacer aquello que siempre quisieron. Podrían haber emprendido el viaje en un confortable auto cero kilómetro, pero decidieron hacerlo en un peculiar Citroën, que está desgastado, con detalles artesanales, vistoso, que hace que la travesía tenga otro gustito.
«Queríamos parar la rutina. Nos hicimos la pregunta y decidimos poner fecha. Queremos llegar con este auto hasta Puerto Madryn. Sabemos que con este auto valoramos todo lo que nos puede pasar, pero creemos que la aventura la vamos a vivir como algo inusual», indicó Marcos Amaya a NUEVA RIOJA.
Según uno de sus posteos por redes sociales, el itinerario será el siguiente: La Rioja Capital; La Toma – San Luis; Villa Mercedes – San Luis; Nueva Galia – San Luis; Santa Rosa – La Pampa; Las Grutas – Río Negro; Sierra Grande – Río Negro; Puerto Madryn – Chubut; Los Menucos – Río Negro; Bariloche – Río Negro; San Martín de los andes – Neuquén; Zapala – Neuquén; Malargüe – Mendoza; San Rafael – Mendoza; Tunuyán – Mendoza; Mendoza capital; Jachal – San Juan; Patquia La Rioja; La Rioja.
Sin embargo, más allá que mostrarán los lugares paradisíacos que tiene este país, no se olvidan su pertenencia: La Rioja. «Antes de invadir nuestras redes sociales con paisajes sureños dónde viajaremos, queremos invitarte a nuestra amada Rioja. Una provincia con lugares increíbles, con personas maravillosas, geografía cubiertas de montañas, diques y rutas excelentes. De verdad te invitamos a qué vengas! Nosotros te recibiremos de corazón», dijeron en sus redes.
«Siempre fui fierrero, tuve un par autos personalizados, soy propietario de una revista de fotografía automotriz Radialpro y un día me crucé con unos pibes llamados Racers Club , quienes tienen ideas tóxicas fierreras y pegamos muchísima onda, claro no tenia ni auto, ni moto para acompañarlos en la locura, fue ahí que me surgió armar un clásico personalizado y por fin llegó el citro», contó Marcos Amaya, en la página web de esta peculiar travesía que están a punto de emprender.
«Lo compré, lo escondí 15 días (mi familia no quería saber nada) y lo primero que hice, fue bajarlo al piso, recuerdo que cuando lo traje a casa, ese mismo día lo fui a mostrar a los pibes del club y saben que? A las 10 cuadras se fundió el motor, no tenia una gota de aceite. Después de hacerle motor a cero, fuimos modificando cada detalle para llevarlo al estilo RatRod, estilo que se caracteriza por estar oxidado, despintado, con detalles artesanales y llantas pintadas», agregó Marcos Amaya.
Aquellos que quieran seguir esta travesía, están en Instagram y Facebook. También tienen su página web: https://www.citrorat.com.ar/.
Ellos solventan los gastos con publicidad. Además Marcos sabe de marketing digital. Asimismo colocaron «bujías virtuales», para que la gente pueda donar lo que quiera y así seguir fomentando esta gran aventura que comenzó el martes pasado y continúa por las rutas argentinas.
Fuente: Nueva Rioja